jueves, 31 de diciembre de 2009

DOS PASOS ATRÁS


(Articulo publicado en Viva Jerez el 31/12/09)

Casi 800 kilómetros me separan de Jerez cuando escribo estas líneas a poco de finalizar este año 2009. Probablemente la distancia esté motivando que, en estos días de vacaciones, observe la realidad de mi ciudad con algo más de perspectiva, atendiendo a aquel viejo aforismo que decía que en ocasiones los árboles no nos dejan ver el bosque. Viajar varios días a cualquier ciudad de España, recorrer sus calles, hablar con sus habitantes, imbuirse en sus costumbres, adentrarse en su cultura y, en definitiva, compartir experiencias, es un sano ejercicio que aconsejaría a muchos jerezanos a fin de no caer en la tentación de mirarse en exceso el ombligo. Considero que el chauvinismo de serie que se nos marca en la piel cuando nacemos, nos imprime un carácter que necesariamente debe diluirse con la simple observación de lo que ocurre fuera de las Fronteras de Jerez. Es ese sentimiento patriotero y pueblerino de “lo mío es lo mejor” (que aún persiste en algunos sectores de nuestra sociedad) el que debemos desterrar de una vez.


No somos el centro del universo. De seguir pensando así, corremos el riesgo de anquilosarnos y aislarnos en medio de una aldea global que, nos guste o no, forma parte de nuestro presente y de nuestro futuro. No debemos continuar justificando actitudes bajo el paraguas de una idiosincrasia mal entendida. Y conste que defiendo lo mío como nadie, y que considero a Jerez como una de las ciudades más encantadoras para vivir. Probablemente porque nací aquí y aquí pienso continuar viviendo. Pero, en ocasiones, me dejo llevar por la corriente más jerecícola y anclada en el pasado y tiendo a magnificar lo que me rodea y a edulcorar realidades. Es entonces cuando procuro dar dos pasos atrás, y en la distancia, observar el maravilloso bosque en el que vivo, con sus luces y sus sombras, y me doy cuenta de los árboles que están frondosos y esos que debe talarse porque han muerto, y de las necesarias repoblaciones de árboles de otros bosques.


Esa mínima distancia me sirve también para constatar que mi bosque forma parte de un conjunto infinito de bosques que están interrelacionados entre sí, y que en todos hay luces y sombras. Dar dos pasos atrás nos servirá a todos a valorar de una forma más justa la ciudad (el frondoso bosque), en el que vivimos. A dos pasos de Jerez (es un decir), entre naranjos y palmeras, horchatas y paellas, intento coger impulso ante un nuevo año que está a las puertas y que les deseo sea al menos mejor que el que finaliza. Un abrazo a todos... y feliz 2010.

martes, 22 de diciembre de 2009

Conferencia de Amparo Bou

Numerosas personas se dieron cita el lunes en el Salón de Actos de la ONCE para asistir a esta conferencia que, organizada por el Ateneo de Jerez, fue pronunciada por la vocal de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y ex presidenta de la Unió de Periodistes Valencians.

La presentación corrió a cargo de Rosa Bautista, ex teniente de alcalde del Ayuntamiento jerezano que, en su etapa pública, fue una firme defensora de los derechos de las mujeres y puso en marcha diferentes proyectos que hoy son referente en todo el país.

En el transcurso de la conferencia, Bou Martí reclamó para los periodistas su responsabilidad a la hora de informar a cerca de los casos de violencia de género, tal y como lo reclama la propia UNESCO. “En este tipo de informaciones, el periodista no puede permanecer equidistante entre víctima y verdugo, siempre sin faltar a la verdad de los hechos, es necesario ponerse del lado de quien ha visto vulnerados sus derechos con una agresión intolerable. Sin embargo, el hecho de que el periodista reconozca su capacidad de influencia en la sociedad, y tenga que ser extremadamente cuidadoso por ello, no significa que se pueda hacer culpables a los medios de comunicación por este tipo de crímenes, ni siquiera que esté en manos de los profesionales de la comunicación el buscar soluciones”.

Por eso, la periodista valenciana señaló en su intervención la recomendación expresada en los manuales que ha editado la Federación Española de Periodismo en el sentido de no ahondar en los detalles escabrosos del crimen, no dar a entender o “justificar” la agresión por un supuesto mal comportamiento de la víctima (aquello del crimen pasional, el “la maté porque era mía”, pasó a la historia), y situar estos casos como una agresión colectiva, social, no como un caso privado. Porque los casos de violencia contra la mujer son una agresión a los derechos humanos, como ha señalado una declaración de la UNESCO. “El periodista puede equivocarse, pero intenta colaborar en el esfuerzo colectivo por erradicar esta lacra, y confía en poner su granito de arena para conseguirlo”.

Es recomendable también que el periodista se ponga de parte de la víctima, para fomentar un rechazo social a este tipo de violencia, aunque sin caer en el morbo o el victimismo”, señaló Amparo Bou, quien en este sentido abogó igualmente por “preservar la identidad de la mujer, para no perjudicar a sus familiares, mientras que, cuando haya una confirmación total de la identidad del agresor (porque en caso contrario juega también la presunción de inocencia), es conveniente difundir la identidad del hombre, para que socialmente se vea rechazado por lo que ha hecho, y sirva de advertencia a otros que tengan en mente imitarle”.

viernes, 18 de diciembre de 2009

PERIODISMO Y VIOLENCIA DE GÉNERO

Este pasado martes, un anciano de 86 años mató a su mujer de 80, en Catadau (Valencia). Es la víctima número 52 de violencia contra la mujer en España en lo que va de año. Pero era mucho más. Se llamaba Mercedes. Tenía dos hijos y tres nietos, y era muy querida en su pueblo. Había compartido cincuenta años (¡CINCUENTA AÑOS!) con el hombre que finalmente la mató a golpes con un bastón. El asesino pasó después cuatro horas viendo la televisión, antes de avisar a un hijo. Ella había comentado a su familia y las vecinas su miedo a los continuos cambios de humor del marido, y a él se le había metido en la cabeza que ella le quería envenenar. Vecinos y amigos no atendieron a los requerimientos de la mujer, e incluso algunos medios de comunicación han caído en la tentación de casi justificar el crimen, sugiriendo, apuntando quizá que el hombre actuó en legítima defensa. Una interpretación indeseable, que indica que la sociedad en general y también los periodistas hemos de reflexionar sobre nuestra responsabilidad a la hora de acabar con esta lacra de la violencia contra las mujeres.

Considero que los periodistas no debemos caer en la tentación (en ningún caso intencionada) de “acostumbrar” a los lectores, oyentes o televidentes a informaciones frías en las que la mujer asesinada es una cifra más que sumar a la lista anual de violencia de género. Detrás de cada caso hay una mujer que ha padecido el horror en su propio domicilio, la humillación en sus propias carnes y desprecio en su alma.

Por eso les recomiendo la conferencia que al respecto, y organizada por el Ateneo de Jerez, pronunciará el próximo lunes, día 21 de diciembre en el Salón de Actos de la ONCE en Jerez, Amparo Bou, vocal de la Federación Española de Periodistas y ex presidenta de la Asociación de la Prensa de Valencia. Analizará el tratamiento de los periodistas ante los casos de violencia de género; un tema que le ha servido de base para varios manuales que se han editado en la Comunidad Valenciana, así como para decenas de conferencias, ponencias y charlas que ha protagonizado por todo el país. Es todo un lujo para esta ciudad contar con su presencia y por ello les invito a que asistan.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

EL TRANCAZO

(Artículo publicado en Viva Jerez el 10/11/09)

Fue este pasado viernes. Llevaba toda la semana preparando el acueducto (dícese popularmente del puente festivo que se une en el calendario con el fin de semana). Desde el martes dando vivas a la Inmaculada y la Constitución y a esa fórmula que en Andalucía (en otras comunidades no es así) permite pasar el festivo que cae en domingo al lunes. Había hasta preparado una agenda propia de zambombas, de visitas a colegas, de comidas con la familia, de chapuzas de última hora en casa y de pelis por alquilar. Y llegó el viernes. Ya, cuando desperté, me noté algo raro. Estaba fatigado, cansado. Me dolía la cabeza. ¡Habré dormido mal!, pensé. Me fui al trabajo intentando olvidarme de ese malestar pero, a medida que pasaba la mañana se acrecentaba cada vez más. No podía ser. ¿Alguien tiene un frenadol o algo que se parezca?.

Poco a poco se acercaba el momento de marcharme de puente y los síntomas eran ya muy evidentes. Me despedí de los compañeros. Alguien dijo: ¡Vaya trancazo has pillado… Y a las puertas del acueducto. Qué mala suerte…!. Le sonreí irónicamente y ni siquiera le contesté. Me fui a casa con la firme intención de tenderme en el sofá, tomarme algún antigripal, un caldito bien caliente y taparme hasta las orejas. Si es un simple resfriado, mañana o pasado estaré bien –pensé- y aún tendré tiempo para disfrutar del domingo, del lunes y del martes. No estaba todo perdido. Pero no remitía. Ni el caldito, ni el frenadol, ni la mantita hasta las orejas. Antes al contrario la situación iba empeorando por minutos. Tenía fiebre. El termómetro marcaba 39 y tiritaba hasta en el carnet de identidad. A esas alturas, pese a mi obstinación por negarlo, el diagnóstico era muy claro. Tenía gripe. No sé si la A, la B o la C, pero la había pillado. Y entonces me acordé de él. Fue una semana antes. Era lunes y estaba en el cine. Se pasó toda la película tosiendo detrás mía. Recuerdo que me giré para mirarlo pero siguió. Fue él quien me la pegó. ¡Como lo vea otra vez, se acuerda…!.

Hoy jueves me encuentro mejor y he venido a trabajar, pero me he pasado el acueducto con el clínex en la mano, los ojos entornados y llorosos, el fastidioso dolor de músculos y ese perenne martilleo de cabeza que no me dejaba ni a sol ni a sombra. También es mala suerte. Para un puente que había hecho planes… Y para colmo, la peli del cine era malísima…

jueves, 26 de noviembre de 2009

EL VECINO

(Artículo publicado en Viva Jerez el 26/11/09)
Fue de madrugada. De improviso. Dormía plácidamente cuando algo me despertó. Era claramente el chirriante sonido de los oxidados muelles de una cama que, de manera acompasada (ya me entienden), se colaban por la pared de mi dormitorio y accedían sin permiso a mi yunque, martillo y estribo haciéndome caer de sopetón de los brazos en los que me mecía el divino Morfeo. ¿Esa vivienda no estaba vacía?, pensé. Mira por donde acabo de enterarme que ya tengo nuevos vecinos. Miré la hora: las 4 y 20 minutos. Suponía que la juerga estaría a punto de acabar. No eran horas para… eso. Así que me resigné y aproveché para ir al baño, pesarme en la báscula (prefiero obviar dónde se situó la flechita) y tomarme un vaso de leche.

Minutos después volví a la habitación pero la juerga… no había terminado. Antes al contrario el jaleo había ido in crescendo y, al “penetrante” sonido de los muelles se le habían unido los jadeantes susurros de una buena moza que expresaba su alegría con una algarabía inusitada. Y allí estaba yo. Sentado en la cama, oyendo la escena y acordándome de la santa madre del arquitecto que diseñó la separación entre las viviendas. Diez minutos más tarde todo acabó. O al menos, eso creía. Entorné los ojos y cuando comencé a notar la presencia de Morfeo… otros ruidos me devolvieron a la cruda realidad. ¿Qué era eso?. Tardé unos segundos en identificar el origen de los sonidos que salían de la pared. Y al fin di con la tecla. ¿Alguien sabe decirme porqué los vecinos molestos tienden a arrastrar muebles, cerrar y abrir puertas o cerrar ruidosamente la tapa del water a horas intempestivas?.

Creí, erróneamente, que tras la “juerga flamenca” llegaría el descanso del guerrero, el cigarrito y todo eso. ¡Pero no!. Estuve otra hora dando vueltas en la cama. Hasta que volvieron. Eran las 6 de la madrugada y aún les quedaba gasolina para arrancar de nuevo la máquina del placer. No aguanté más. Al primer envite sonoro que traspasó el delgado tabique de mi dormitorio me incorporé y, con el puño cerrado, golpeé con fuerza hasta tres veces la pared. Pero nada. Creo que incluso los animé a seguir en la brecha. En fin, que ya no puedo más. De esta noche no pasa. Ya está bien. No me conocen cuando me enfado. Menudo soy yo. De ninguna manera soportaré otra noche así. ¡Me he comprado un par de tapones de cera y ya he visto un pisito muy mono y barato en Internet!. ¿Qué quieren?.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Nacho Sacaluga premiado el Festival In-Edit

Hace algunas semanas os hablé de mi amigo Nacho Sacaluga. Un periodista gaditano, actualmente desempeñando su labor en Tele-Madrid, y que había realizado un documental muy serio sobre un asunto tan humorístico con el Carnaval de Cádiz ("Febrero, cuando al vida es carnaval"). Estuve en el estreno y me entusiasmo su particular visión sobre esta fiesta, la investigación en torno a sus orígenes, cómo sin una simple voz en off era capaz de narrar una historia en la voz de sus propios protagonistas. El resultado es un trabajo que ha gustado mucho y, prueba de ello, es el premio que le ha sido concedido en el Festival In-edit de Barcelona, en la sección de documentales. El premio dice así:

GANADOR IN-EDIT.BEEFEATER SECCIÓN NACIONAL:
FEBRERO. CUANDO LA VIDA ES CARNAVAL, de Nacho Sacaluga.

Por apuntar la esencia del carnaval como nudo de confusión, intercambio y humor grueso. Por reivindicar una manifestación cultural popular y dignificarla mediante su retrato y estudio. Por la audacia de plantear una película así y por el intento de no casarse con nadie y de mostrar ese fenómeno que todos conocíamos, pero no entendíamos, desde todos los puntos de vista posibles. Por su carácter poliédrico y su esmero en ser riguroso.

Más información en http://www.in-edit.beefeater.es/webapp/

También aquí: http://www.in-edit.beefeater.es/webapp/pelicula;jsessionid=qu1ghtrwkfl?peli_id=33

Entrevista en La Voz: http://www.lavozdigital.es/cadiz/20090614/cadiz/carnaval-cadiz-cinematograficos-20090614.html

miércoles, 18 de noviembre de 2009

La paja en el ojo ajeno

(Artículo publicado en Viva Jerez el 19/11/09)

He repetido alguna vez que tengo una relación amor-odio con esta ciudad. Esta aparente contradicción, que tiene una base empírica de más de 40 años, hace que Jerez me atrape, me cautive entre sus fronteras invisibles pero, casi en paralelo, me ahogue y presione de tal forma que, en ocasiones, precise salir para tomar aire fresco. Considero que el amor pasional que tengo por la ciudad que me vio nacer me capacita para criticarla cuando lo crea oportuno. Y lo pienso hacer ahora. Me voy a referir, en particular a esos que se permiten el lujo de opinar, de interferir gratuitamente en tu vida privada porque conocen al primo hermano del cuñado de tu tía abuela.


Esos que ven la paja en el ojo ajeno y hacen de esa máxima una forma de vida. Esos que critican tu forma de vestir, de actuar o de comportarte. Personajillos de pueblo sin estación que te dicen a la cara que son muy tolerantes, que jamás se meterán en la vida de los demás y que cada uno puede hacer con su vida lo que quiera… y que, cuando les das la espalda, te clavan el puñal de la falsedad y la traición denostando ante terceros tu forma de actuar en la vida. De esos, desgraciadamente aquí en Jerez, los hay a patadas. Justifican su mediocridad mirando furtivamente a través de la cerradura ajena. Presumen de conocer la vida y milagros de los que les rodean y la cuentan en los foros menos indicados siempre con las mismas coletillas: “no se lo digas a nadie, pero resulta que fulanito…”, “me ha contado que menganito…” o “¿Te has enterado de que…?. Actitudes que probablemente sean inherentes a nuestra más secular tradición pueblerina, pero que provocan una sensación de ahogo cuando las padezco en primera persona o cuando afectan a la gente de mi entorno más cercano.


Y es que Jerez, y lo digo sin ambages, sigue siendo un pueblo. Entiéndase esta sentencia con el mayor cariño que le profeso y con la doble lectura que puede adoptar este término. Confieso que me atrae la acepción más entrañable del término, esa que va íntimamente ligada a adjetivos como bienestar, calidad de vida, cercanía, tranquilidad o comodidad. Es el otro sentido de la palabra pueblo, ese que vive por y para el “qué dirán”, el que me produce ese desasosiego interno que me obliga a respirar aire fresco en ciudades donde puedes pasear sin una mirada en el cogote y sin el comentario en voz baja de uno que conoce al primo hermano del tío de tu cuñado.


martes, 17 de noviembre de 2009

Premios EMA RTV

Fue una jornada para recordar. Trabajar y ver cómo tu labor es reconocida, directa o indirectamente, es siempre muy grato. Uno no trabaja para recibir galardones o reconocimientos, pero cuando éstos llegan, sinceramente os digo, es muy gratificante. Sobre todo, cuando la emisora a la que has dado más de dos decenios de tu vida vuelve a estar en el punto de mira de los partidos de la oposición, ahora que estamos a poco más de un año de las elecciones.

Siempre, (no sólo ahora), desde hace años, he repetido que a los profesionales deben apartarnos de la guerra política. Pero probablemente, en la mente de algunos está el criticar la labor PROFESIONAL que realizan los técnicos. Quizá sea inherente a la pasta de la que están hechos estos personajes (y no señalo a ninguno en particular) pero siempre me produce desazón que se metan con los que simplemente nos dedicamos a esto del periodismo.

Por eso, cuando nos premian la labor realizada, creo que deberíamos darles a más de uno con el premio en las narices. Aquí, en Onda Jerez hay muy buenos profesionales y al que lo dude que se vea las caras conmigo. ¡ He dicho !. Ahí va la noticia del premio... para quien corresponda.

La Asociación que agrupa a las Emisoras Municipales de Andalucía (EMA RTV) festejó este pasado viernes su 25 aniversario con una gala celebrada en el sevillano Casino del Aljarafe y en la que se otorgaron once premios, divididos en diferentes categorías.

Onda Jerez Televisión acaparó la mayoría de las nominaciones, con un total de seis (Mejor programación informativa en televisión, mejor web de un medio local, mejor programación genérica en televisión, mejor programa de radio de participación ciudadana realizada por colectivos sin ánimo de lucro, mejor programa de divulgación musical en televisión y mejor programación genérica en radio). Finalmente, la web Canal Flamenco obtuvo el premio de divulgación musical y el programa de radio “Desde fuera del armario” el de participación ciudadana.

En el primero de los premios el jurado destacó la apuesta de Onda Jerez por fomentar y difundir la cultura del flamenco en todas sus facetas, con una programación de 24 horas a través de Internet. Un escaparate mundial del flamenco desde una de sus más representativas cunas hacia el mundo. El director gerente de Jecomusa, Pedro Rollán, destacó en su intervención, la intención de saltar en breve tiempo desde Internet a los grandes soportes de la televisión digital.

En cuanto al programa de radio, el jurado subrayó el compromiso de la emisora, en particular, y del Ayuntamiento de Jerez en general por la diversidad, con la puesta en marcha de un programa pionero en nuestro país dirigido específicamente al colectivo LGTB (Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales). La presentadora del programa, Carmen Rodríguez, tuvo unas palabras de recuerdo a las personas que aún hoy siguen siendo torturadas y condenadas a muerte en varios países por su condición sexual.

EMA RTV, creada en 1984, engloba a 106 emisoras andaluzas y posee tres líneas de trabajo: la producción y difusión de programas de televisión y radio; proyectos de comunicación con emisoras latinoamericanas, y la formación en Andalucía de trabajadores en la comunicación y las nuevas tecnologías.

Entre los invitados a la gala del viernes estuvieron el consejero de Presidencia de la Junta, Antonio Ávila, el presidente del Consejo Audiovisual de Andalucía, Juan Montabes o directora general de Medios de Comunicación Social, Matilde Santiago.

jueves, 12 de noviembre de 2009

LA RED ENAMORADA

(Artículo publicado en Viva Jerez el 12/11/09)

Desde el principio de los tiempos el sexo ha sido el eje que ha vertebrado la sociedad impulsando una fuerza y un poder de atracción que ha permitido mantener la cohesión de la pareja y con ello la dura y difícil crianza de los hijos. Los seres humanos tenemos una herencia genética animal muy fuerte y por eso hemos ido eligiendo pareja siguiendo un juego seductor en el que hombres y mujeres hemos desarrollado estrategias amorosas bien definidas. El denominador común ha sido la atracción “química”, previa a la formalización del compromiso y de la vida en común. Después se intentaba ajustar la relación y encajarla como si de un puzzle se tratara, diferencias, gustos, manías, familia, amistades, trabajo y un largo etcétera. En los últimos años, esta realidad ha comenzado a cambiar con la búsqueda de relaciones afectivas en la red. Posiblemente el tipo de vida, la soledad y la falta de tiempo nos animen a ello, pero lo que tal vez pase inadvertido es que la lógica interna es muy coherente.


En Internet se buscan una serie de perfiles, es decir, se da una sustitución de la química en favor del elemento cerebral. Seguimos alimentando el instinto primario, pero la aldea global de la “red de redes” nos está haciendo alterar esa relación. Me pregunto si esta fórmula, que ya ha propiciado que miles de personas hayan encontrado su otra media naranja, puede llegar a convertirse en una solución al alto índice de fracaso en las parejas. O dicho de otra forma. ¿No es más factible que primen el sentido común, la razón y la compatibilidad entre dos seres humanos como elemento previo al flechazo?. Este último tiene un componente irreflexivo que, a veces, nos lleva a equivocarnos. Sin embargo, el anonimato de Internet nos marca unas pautas iniciales de compenetración que, a posteriori, pueden ser refrendadas mediante la química del amor.


Y hecha la propuesta, quiero salvar el elemento irracional, romántico y poético, antes de que pueda tacharse de frívolo. ¿Acaso hay algo más enigmático que encontrar a nuestra media naranja entre la inmensidad de la red?. Hegel nos enseñó que todo lo racional es real. Las relaciones virtuales son por tanto tan reales como las que se dan en la vida. El amor está en el aire, es decir, también en la red. Y el Cupido lo sabe.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

MURPHY Y SUS COSAS

(Artículo publicado en Viva Jerez el 4/10/09)
Sigo sin comprender la causa por la que se hace patente la denominada Ley de Murphy cuando menos interés tenemos en que aparezca. El caso que le cuento es reflejo de cómo esta norma no escrita puede llegar a alterar nuestra razón hasta límites que rozan la locura. Fue este lunes. Debía acudir a una cita muy importante (de las que no aceptan segunda convocatoria) a las 7,30 de la tarde. Afortunadamente –pensé- tenemos una ciudad accesible que nos posibilita cruzarla en coche, de norte a sur, en 15 minutos. Pese a todo, salí de casa más de media hora antes. Y la primera en la frente. Un coche aparcado en segunda fila justamente a la altura del mío. Toqué el claxon una y otra vez hasta que, tras 5 minutos de espera apareció un señor de andar despreocupado y sin aparente prisa que, encima, me recriminó mi nerviosismo. Respiré hondo, me callé.

Por fin arranqué y salí de allí. Miré la hora. Me sobra tiempo, pensé. Al final de la calle me encuentro con una avenida y, delante, un coche de autoescuela. Me armé de paciencia. 4 minutos esperando a que el conductor (seguro que era su primera clase práctica) decidiera incorporarse a la avenida. Tras varios amagos, se decide y cuando giro, el semáforo se torna rojo. 1 minuto después, ya en verde, acelero y al poco otro semáforo en rojo. Y así hasta en cuatro ocasiones. ¿Qué pasa, que al Ayuntamiento le sale más barata la bombillita roja que la verde?. ¡Qué sincronización!. Para colmo, a la mitad de la avenida debo parar porque un colegio en excursión por el centro está cruzando por el paso de cebra a paso de tortuga. Empecé a ponerme nervioso. Eran las 7,35. La impaciencia crecía. Nada más podía ocurrirme, pensé. Me equivocaba. Al intentar atajar por una calle de única dirección, el coche de delante se detiene. De él sale una pareja que, sin mediar palabra, abre el capó y comienza a descargar toda la compra del mes. Bolsas y más bolsas del Carrefour.

Ya son las 7.45 y aún estoy a la mitad del trayecto. Comienza el tic de mi ojo derecho. Por fin terminan y arranco de nuevo. Suena el teléfono y lo cojo. ¿Sí dígame?. ¡Estoy llegando. En cinco minutos estoy ahí!. En ese momento un policía local me hace señas para que me detenga. ¡Le tengo que multar por hablar por teléfono!. ¡Aparque en el arcén y espere a que llame a un compañero porque me he quedado sin impresos para la multa!. Vuelve a sonar el teléfono. ¡Maldito Murphy!.

miércoles, 28 de octubre de 2009

AJO, BERZA Y CHICHARRONES

(Artículo publicado en Viva Jerez el 29/10/09)

Es la guerra. La guerra a la grasa, a los dulces, a los chicharrones y a la berza. La moda es estar delgado, a veces extremadamente delgado, para cumplir los cánones que nos impone la televisión, el papel cuché o la cadena de grandes almacenes tal o cual. Están demostradas las ventajas de mantener una dieta sana, equilibrada, mediterránea donde no falte el ejercicio físico y en la que no se abuse de nada. Pero de ahí a pensar que la belleza está en chicos o chicas que cuando los ves te recuerdan a los niños de Biafra y te dan ganas de darle 2 euros para que coman algo sólido, pues ¿Qué quieren que les diga? Va un abismo. En la retina de todos están esas chicas de la pasarela Cibeles, que afortunadamente ya no desfilan pero que nos asombraban por esqueléticas. A esas las que yo las invitaba a un potaje de garbanzos, de esos que hace mi tía Charo, con su pringá, su pan de campo y vamos que nos vamos que esto no será ná. Todo ello aderezado con un par de cervecitas, unas olivitas y de postre un buen trozo de tarta de chocolate con galletas María impregnadas en crema. Después una buena siesta y, les aseguro que una semana, no las reconocerían ni la madre que las... trajo al mundo.

En el otro extremo están los obesos, los gordos. Esos que no pueden parar de comer o bien que el metabolismo les ha jugado una mala pasada y, además, creen que ya no hay vuelta atrás. Comen a todas horas, sin medida, para después sentirse culpables del crimen cometido y hacer un examen de conciencia para un futuro que nunca se cumple. Son esos que siempre se engañan a sí mismos diciendo que, para primeros de año -esta vez sí- empiezo la dieta y voy al gimnasio... Está claro que tampoco es ese el camino.

Ahora que se acerca la Navidad, que la tentación nos acecha en cada mesa, y que las fiestas vienen cargadas de polvorones, pestiños, mantecados y roscos de vino, les sugiero moderación y adentrarnos de lleno en nuestra dieta mediterránea. Y si quieren ir el domingo a una venta para tomar una berza, unos chicharrones o un ajo caliente... ¡Adelante!. No se priven, que la vida son cuatro días. Eso sí, al día siguiente una ensalada con todos sus avíos, un par de mandarinas de postre y una buena caminata, que tampoco se puede abusar. Que ustedes lo coman bien...

jueves, 22 de octubre de 2009

NO ENTIENDO NADA

(Artículo publicado en Viva Jerez el 22/10/09)

La expresión contenida en el título de este artículo me martillea en mi cabeza una y otra vez cuando observo situaciones incomprensibles en la sociedad en la que me ha tocado vivir. Paso a relatarles algunas y ustedes opinen.

Primera. Habrán observado esas campañas de publicidad que nos alertan sobre los peligros en la carretera incidiendo en los efectos negativos de conducir bajo los efectos del alcohol o de sobrepasar la velocidad permitida. Voy a incidir en esto último. Que se multe al infractor me parece correcto. Pero que alguien me explique porqué este país multa a los conductores que sobrepasan una determinada velocidad pero, sin embargo, les permite que en sus velocímetros aparezcan cifras mareantes como 220 ó 260 km. ¿Quién corre a 260 km?. ¿Porqué se permite la venta de vehículos susceptibles de alcanzar esas velocidades de vértigo en un país que ha establecido el límite en 120 km?. Que me lo expliquen.

Segunda. En este país el consumo, la posesión y el cultivo de marihuana está prohibido y penado con multas e incluso cárcel en virtud al Código Penal. Pero sin embargo, se permite la compra venta de semillas de cannabis en tiendas legalmente establecidas. ¿Para qué quiere alguien comprar semillas si después no puede sembrarlas?. A eso se le llama incongruencia jurídica o simplemente “mirar para otro lado”.

Tercera. Para que mi hija de 16 años pudiera ir al Villamarta con el colegio a una sesión de teatro tuve que firmar un consentimiento por escrito. Sin embargo si ésta decidiera abortar, igual ni me entero ni, por supuesto, necesitaría mi aprobación para hacerlo. Que me lo expliquen.

Cuarta. La prostitución en España no es legal ni ilegal; es alegal. El mercado del sexo no está ni prohibido, ni regulado, ni legalizado. Está tolerado como una realidad contra la que ninguna institución se decide a actuar de modo firme porque no hay forma de hallar un equilibrio entre las posiciones abolicionistas y regulacionistas. Podría poner decenas de casos más de lagunas y vacíos legales absurdos que hacen honor a esa frase tan popular de “quien hace la ley hace la trampa”, pero sinceramente aún hoy me sigue produciendo desconcierto que algunos legisladores no pongan pie en pared y atajen de una vez esas trampas, esas situaciones irregulares que todos conocemos. No entiendo porqué. No lo entiendo.

miércoles, 14 de octubre de 2009

El despertar de los sentidos

(Artículo publicado en Viva Jerez el 15/10/09)

Abrió los ojos y miró a su alrededor. Allí estaba ella, en una casa extraña, junto a un hombre que dormía plácidamente y cuyo nombre no recordaba. Sus ojos recorrieron su cuerpo desnudo y en sus labios asomó una tímida sonrisa al recordar los besos y los abrazos, las caricias y los susurros de toda una noche de pasión y desenfreno. Su vello se erizó al revivir esos momentos que se le antojaba mágicos y maravillosos.


Y lo más extraño es que se sentía feliz, sin remordimientos. Durante años, la habían educado para ser recatada, para esperar a que ese hombre bueno y de buena familia, que con las mejores intenciones la llevara de blanco al altar. ¡Cuidado con los hombres!, le había advertido su madre. ¡Nada de placeres carnales!, le habían ordenado los curas martilleándole constantemente con el concepto de pecado. Y entre advertencias y órdenes su vida se había limitado a esperar una oportunidad que nunca llegó. Desde su andén vio transitar trenes que pasaban de largo, pero también vio pasar su vida de un plumazo. Ya no era esa joven lozana que hacía volver la cabeza a los chicos de su barrio. Cuando ahora se miraba al espejo veía a una persona madura que había envejecido manteniendo su honra intacta. ¡Su honra!. ¿Y su vida? ¿Quién se la devolvía?. Tenía 56 años y su arroz estaba para pegar sobres. Y ahora estaba allí, desnuda, junto a un hombre que le había despertado de un sueño de años. Pensó en todo lo que se había perdido en el camino, en los trenes que nunca cogió, en las noches apasionadas que nunca vivió. Se incorporó lentamente, sin querer despertarlo y se dirigió al cuarto de baño. El espejo le devolvió la imagen de una mujer mayor pero exultante, despeinada pero radiante, henchida de felicidad. Recorrió con la mirada su oscuro y desnudo objeto de deseo despojada ya de cualquier sensación de pecado. Se encontraba preciosa.


Cerró sus ojos y recordó al detalle la noche anterior, el cortejo inicial, el nerviosismo posterior, la calidez de sus cuerpos entrelazados, el ímpetu desenfrenado que desconocía poseer y que la había acompañado durante la noche... y el clímax final. Abrió sus ojos y volvió a sonreír. Regresó a la cama y lo miró fijamente. Aún dormía. Recorrió con la vista el cuerpo desnudo del hombre que yacía en esa cama. Se sentía como una colegiala que acababa de descubrir el amor. Acercó los labios a su frente y lo besó. Y volvió a sonreír...

jueves, 8 de octubre de 2009

Tenis de Mesa Jerez

Jerez cuenta ya esta campaña con un club de tenis de mesa en División de Honor Nacional, que es la segunda de este deporte. El Club Deportivo de Tenis de Mesa Jerez (CTM Jerez) se ha fusionado con el CTM Lebrija y ha resultado una entidad que cuenta con la experiencia cosechada en sus años de existencia y que ahora se asoma a la éelite de este deporte con objetivos muy claros.

Inicialmente el objetivo no puede ser otro que el de la permanencia, ya que tiene que enfrentarse con una situación económica complicada y es el único equipo de la categoría que no cuenta con jugadores extranjeros en sus filas. La fusión con el CTM Lebrija tenía la ventaja de conseguir una plaza en la categoría de plata, pero existe un desfase económico que debe ser cubierto con las subvenciones que están pendientes del Ayuntamiento, de la Junta de Andalucía y con la llegada de algún patrocinador, para lo que se está trabajando desde hace meses.

El equipo estará compuesto por Juan Gómez, de 21 años, que procede del CTM Lebrija y que ha sido campeón de España en varias categorías; Jesús Martín, de 26 años, campeón de España universitario que procede del CTM Jerez, y Fabio Muriel, de 35 años, que llega del CTM Coria y con un extenso palmarés en su carrera profesional.

La competición comenzará para el club jerezano este sábado, 10 de octubre y el debut lo realizará contra el CajaGranada en el instituto Fernando Sabater, donde disputará sus partidos y donde también realizará los entrenamientos tanto el primer equipo como el resto de los combinados del club. El CTM Jerez cuenta, además, con un equipo en Primera Nacional, formado en su totalidad por jugadores formados en la cantera jerezana, en Superdivisión de Honor Andaluza, donde militan jugadores veteranos que fueron componentes del S.C. Soberano y otro en División de Honor Andaluza, compuesto por los jugadores jóvenes más destacados de las escuelas deportivas del club. Además, la entidad jerezana cuenta con un total de 40 niños en su cantera, dividida en tres escuelas, una en el C.P Miguel Primo de Rivera, otra en la AAVV Parque Atlántico y la última en el pabellón deportivo de Guadalcacín.

martes, 6 de octubre de 2009

Respeto a los profesores

En estos días se habla mucho sobre el debido respeto a los profesores. Incluso, en la Comunidad de Madrid se ha presentado una iniciativa en este sentido. La historia imbrica mucho con la polémica suscitada por la entrada en vigor de la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía (aunque les confieso mi posición favorable a tal medida). Considero que ambas cuestiones ponen las bases para un futuro comportamiento cívico, democrático y participativo.


Promover el respeto a los docentes en particular y todas las personas en general, los derechos humanos y el diálogo como única solución de los conflictos, la igualdad de géneros, la solidaridad sin fronteras, la paz en la justicia, combate la xenofobia y el racismo, son valores esenciales que cualquier padre debería establecer como esenciales en la educación de sus hijos. Precisamente, uno de los valores que enseña esta nueva materia es el respeto máximo a los que piensan diferente así como el derecho democrático a expresarlo públicamente en cualquier foro. Muchos de estos padres recordarán en su etapa escolar una asignatura llamaba Urbanidad. Se enseñaba a los escolares a comer con la boca cerrada, tratar con respeto a las personas mayores, levantarse cuando entraban, dejarles pasar delante de una puerta, ofrecerles el asiento, no tirar los papeles al suelo, limpiarse la boca antes y después de beber, no comer hasta que todo el mundo estuviera servido... Normas de convivencia que hoy por hoy harían esbozar una sonrisa a más de uno, pero que a mi juicio marcaban una pauta de convivencia y comportamiento basada en el respeto a los demás.


Desconozco si la asignatura de Urbanidad o la actual de Educación para la Ciudadanía serían la panacea para paliar las lagunas de una sociedad que, a mi juicio, está perdiendo los valores y los gestos. Pero coincidirán conmigo en que algo debe hacerse para evitar situaciones como la violencia de género, la falta de respeto de los alumnos a los profesores, el pasotismo generalizado de una parte de la juventud, la poca o nula atención a nuestros mayores. Padres y profesores, al unísono y en paralelo, en las aulas y en casa, deberían poner pie en pared porque nos jugamos mucho. Y conste que no es una cuestión baladí, porque hablamos del futuro de nuestros vástagos y con eso no se juega. Ya en el siglo VI antes de Cristo Pitágoras sentenció “Educad a los niños y no será necesario castigar a los hombres”. Y no se equivocaba..

martes, 29 de septiembre de 2009

VICASA NO SE CIERRA

Vicasa no se cierra. Este es el lema de la manifestación que hoy martes partirá desde la plaza del Arenal a las siete de la tarde en contra del anunciado cierre de la fábrica de botellas de Jerez.

Hoy la ciudad debe volcarse. Hoy Jerez debe salir a la calle para decir NO al cierre de una emblemática factoría que, tras más de un siglo de permanencia, pertenece de alguna forma al pueblo de Jerez.

Hoy es un día importante y la ciudad debe responder con su presencia en las calles del centro, sin partidismos, sin colores, al margen de las ideologías. Lo importante hoy es que los colores de la bandera de Jerez aúnen posturas y el esfuerzo sea común para evitar un anuncio traumático para una plantilla compuesta por más de un centenar de trabajadores directos y otros tantos indirectos que viven de la fábrica de botellas.

No hay razones para el cierre. Lo dicen trabajadores, sindicatos y el propio Ayuntamiento. No se entiende la postura de una empresa que, en dos meses cambia de postura y no acepta un convenio que les conviene en todos los sentidos y que posibilitaría el traslado de esta factoría a la Ciudad del Transporte. Por todo eso, hoy es un día decisivo para Jerez. VICASA NO SE CIERRA.

Más información en esta PÁGINA WEB DE LOS TRABAJADORES DE VICASA


martes, 22 de septiembre de 2009

UN BUEN EJEMPLO

(Artículo publicado en Viva Jerez el 17/9/09)

Se llama Emilio Calatayud. Es juez de menores en Granada. Sus sentencias han hecho bajar la delincuencia de jóvenes en esta provincia, a la vez que ha aumentado el número de los que no reinciden en el delito. Hace un par de años publicó un libro en el que da a conocer su forma de trabajo, sus casi 20 años como juez aplicando sentencias en las que solo persigue la rehabilitación del joven. Un libro que he leído y que les recomiendo y en el que afirma que el delincuente es tan solo una “víctima de un sistema social”. Su “método” le lleva a visitar los centros de menores, a seguir los casos una vez que dicta sentencia e incluso a trabajar con ellos en el mismo entorno en el que cometieron sus faltas. La lectura de este libro me ha hecho reflexionar a cerca de la educación que estamos inculcando a nuestros hijos.


Permitanme que extraiga del libro el “Decálogo para formar un delincuente”, verdadero ejemplo de ironía de cómo no educar a los jóvenes. Ahí va. 1: Comience desde la infancia dando a su hijo todo lo que pida. Así crecerá convencido de que el mundo entero le pertenece. 2: No se preocupe por su educación ética o espiritual. Espere a que alcance la mayoría de edad para que pueda decidir libremente. 3: Cuando diga palabrotas, ríaselas. Esto lo animará a hacer cosas más graciosas. 4: No le regañe ni le diga que está mal algo de lo que hace. Podría crearle complejos de culpabilidad. 5: Recoja todo lo que él deja tirado: libros, zapatos, ropa, juguetes. Así se acostumbrará a cargar la responsabilidad sobre los demás. 6: Déjele leer todo lo que caiga en sus manos. Cuide de que sus platos, cubiertos y vasos estén esterilizados, pero no de que su mente se llene de basura. 7: Riña a menudo con su cónyuge en presencia del niño, así a él no le dolerá demasiado el día en que la familia, quizá por su propia conducta, quede destrozada para siempre. 8: Dele todo el dinero que quiera gastar. No vaya a sospechar que para disponer del mismo es necesario trabajar. 9: Satisfaga todos sus deseos, apetitos, comodidades y placeres. El sacrificio y la austeridad podrían producirle frustraciones. 10: Póngase de su parte en cualquier conflicto que tenga con sus profesores y vecinos. Piense que todos ellos tienen prejuicios contra su hijo y que de verdad quieren fastidiarlo. Y después de leer esto, actúen en consecuencia...